SOCIEDAD

Miles de fieles peregrinaron al santuario de San Cayetano: los principales pedidos

Como cada 7 de agosto, los devotos de San Cayetano se reunieron en su templo de Liniers para agradecer, pedir y rezarle al patrono del trabajo.

Si las marchas al Congreso o la Casa Rosada no eran suficiente, miles de personas hicieron este miércoles su peregrinaje al santuario de San Cayetano en Liniers, Ciudad de Buenos Aires, para pedirle pan, trabajo y salud en medio de la crisis económica por los recortes de presupuesto, la recesión y los despidos masivos.

“Vengo a pedirle a San Cayetano por mi mamá, con la fe grande”, comentó a C5N un devoto que llegó hasta Liniers para rezar por “un trabajo seguro, porque hago changuitas, trabajo de seguridad, ahora estoy acá pidiendo”.

“La verdad es que llego a fin de mes casi con lo justo, Dios es grande y no pago alquiler porque tengo la casa de mi mamá, pero la estamos peleando de a poco”, agregó el hombre.

Por su parte, una mujer le dijo al mismo canal que con 68 años está lista para jubilarse pero “la jubilación es tan baja que prefiero seguir trabajando”, y una joven de Isidro Casanova agregó: “la cosa está cada vez peor, toda la gente con necesidad, así que acá estamos pidiendo a San Cayetano“.

“Venimos a pedir trabajo, yo estoy jubilado, pero vengo a pedir para todos los argentinos. Trabajo, pan y salud para todos”, expresó uno de los integrantes de la marcha al santuario de San Cayetano.

“La estamos pasando mal por este gobierno que tira siempre a los trabajadores. Toda la vida trabajamos, acá hay mucha gente que está pidiendo trabajo para todos los argentinos, acá no hay política, lo único que pedimos es que el pueblo esté mejor. Es lo que pedimos siempre a San Cayetano“, agregó.

La marcha convocada por la CGT y organizaciones sociales dejó convulsionado el tránsito de Liniers, pero eso iba a pasar de todos modos ya que cada año es necesario hacer lugar para los fieles que acuden no sólo a pedir sino también a cumplir promesas y a hacer una acción de gracias.

En el caso de Angie, de San Martín, este 7 de agosto es especial: “Vengo con mi hija a agradecer y a pedir por Argentina. Estoy, como la mayoría, complicados. Tengo trabajo formal y hoy por hoy es un montón”, reconoció.

La vigilia comenzó el 6 de agosto y ya por esas horas deambulaba por la zona José, un vendendor ambulante que trabaja en la calle hace 22 años. “Nunca vi tanta pobreza en mi vida como ahora. Estoy desde ayer a las 18, llegué a hacer $ 10.000“, reveló.

“Creo que con este gobierno no cambiamos nada. Esperanza siempre tenemos, pero estamos sufriendo mucho. Pago $150 mil de alquiler, trabajo día y noche y encima aumentan los servicios. Que nos bendiga San Cayetano“, expresó el vendedor ambulante.