Los fantasmas de Javier Milei: ahora quiere liderar una alianza global para defender a Occidente
El Presidente argentino quiere conformar una alianza con Estados Unidos, Italia e Israel para enfrentar los fantasmas que recorren el mundo, según su particular visión geopolítica.
Fue allí, en el estado de Florida —donde todavía se encuentra—, que pidió a los presentes que se constituya “una alianza de naciones libres, custodios del legado occidental”, integrada por la Argentina, los Estados Unidos, Italia e Israel, entre otras naciones.
Milei quiere liderar en el Sur la “alianza de naciones libres”
“Como alguna vez hicieron los antiguos, creo que los que creemos en la libertad debemos unirnos para hacerle frente a esta barbarie y formar una alianza de naciones libres, custodios del legado occidental, estableciendo nuevos lazos políticos, pero también comerciales, culturales, diplomáticos y militares, donde CPAC en esto tiene un rol fundamental“, sostuvo el Presidente.
¿Y quiénes liderarían esa “alianza de naciones libres”? Milei dio precisiones en ese sentido: “Los Estados Unidos liderando en el norte; la Argentina en el sur; Italia en la vieja Europa e Israel, el centinela en la frontera de Oriente Medio”, planteó.
“Porque solo con la fuerza y la cooperación de las naciones libres puede haber una esperanza global de paz y prosperidad. Y porque no hay causa más noble que la causa de Occidente, una línea histórica de la que todos nosotros somos herederos y que tenemos la responsabilidad de restaurar en toda su gloria“, completó el mandatario argentino.
Los fantasmas de Javier Milei en todo su esplendor
El “colectivismo”, el “socialismo” representado por vaya a saber qué países, los defensores del medio ambiente y de los derechos de tercera generación (como el feminismo), son algunos de los fantasmas que el anarcocapitalista argentino vislumbra no solo recorriendo Europa sino como sombras que lo acechan y ponen en peligro a Occidente entero…
Lo que quedó reflejado en las últimas dos votaciones en la Asamblea General de las Naciones Unidas, circunstancias en las cuales ordenó votar contra resoluciones sobre derechos de pueblos originarios del mundo y sobre la violencia dirigida a niñas y mujeres.
La Argentina libertaria lo hizo en soledad absoluta, aislándose incluso del mundo occidental: ni Estados Unidos ni Italia ni Israel, cuyos gobiernos también derechistas aplauden a Milei mientras lo miran de reojo, lo acompañaron.