Abundio Escobar declaró el pasado 20 de junio, pero recién ahora se tuvo en cuenta su testimonio.
“Escuché gritos de una criatura, como llamando a su madre. Gritos como de asustado, de desesperación”, recordó Escobar, precisando que fue a unos 500 metros de su casa, en la punta de la forestación.
Además, afirmó que eso sucedió alrededor de las 18.30 y aseguró que se trataban de gritos de una criatura y no de un ternero, como los fiscales sugirieron en el trámite de la declaración. “Fue claramente el sollozo de un niño, como pidiendo ayuda”, sostuvo.
Un amigo suyo le había informado a Escobar sobre la desaparición de Loan. Cuando el hombre se enteró que el niño pudo haber sido raptado, se presentó a la Justicia y relató lo que había escuchado.
Contó que el día de la desaparición llegaron policías a su casa preguntando si había visto un niño que se había perdido, según la hipótesis que se había instalado en ese entonces.
Recién ayer domingo, a más de un mes de la declaración, la jueza federal Cristina Pozzer Penzo y el fiscal Mariano de Guzmán junto con el jefe de la Policía Federal, Luis Alejandro Rollé, recorrieron el campo de Escobar, así como la denominada zona cero donde desapareció Loan. Allí se llevó a cabo un exhaustivo rastrillaje, la comitiva se retiró del lugar sin dar declaraciones.